México se juega su futuro con reforma energética; el suicidio de Pemex

La reforma energética aprobada en el Senado transforma el futuro de México, pone en riesgo los recursos energéticos y la economía del país, coinciden los académicos Miriam Grunstein Dickter y Alfredo Jalife.

En entrevista conjunta en Aristegui-CNN, la investigadora del Centro de Investigación y Docencia Económica, Miriam Grunstein criticó los alcances de la propuesta que debate el Congreso de la Unión.

“Estamos jugando el futuro de México. El petróleo, cuando hay problemas, los puede agravar enormemente, una apertura petrolera alimenta a gente autoritaria, represiva, le da dinero y medios para fortalecerse. Si tenemos un boom en la industria petrolera con un gobierno autoritario puede empeorar muchísimo”, dijo.

La académica de la división de Estudios Jurídicos del CIDE cuestionó que “de repente hay tanto amor a los mercados”.

“No veo la razón profunda de para qué abrir, si quieren manufactura, distribución del ingreso. No lo veo en la política pública, me parece muy preocupante”, declaró.

En el mismo sentido, Jalife sostuvo que con este debate se juega el destino del país.

“Es un momento súper histórico. A mi juicio, es la muerte, la agonía lenta de Pemex, el último clavo de México en la CFE y el suicidio de México”, dijo.

El analista declaró que la reforma responde a una necesidad histórica de incorporarse a tratados de comercio de América del Norte.

“Va a haber un boom petrolero para las transnacionales en aguas profundas, pero para México soy escéptico, hay que ver qué queda en tierra firme”, dijo.

Jalife lamentó que no exista una preocupación en el tema ambiental dentro del debate.

Recursos públicos y privados

Miriam Grunstein afirmó que hay países como Venezuela, Irán, donde conviven la iniciativa privada con los recursos de Estado.

“(Los mercados) no son entes monstruosos con los que nadie puede agregar. La composición accionaria de las empresas. Irán. No es blanco y negro, es una industria compleja y no es que los intereses de los buenos estén contra los intereses de los malos”, dijo.

Ante esto, hizo un llamado a la sociedad a ser más vigilante del proceso y el resultado.

“Nos estamos jugando muchísimo. Estoy desconcertada que a la gente no le interese el tema. Esto podría implicar la desaparición de Pemex y CFE que son emblemas nacionales importantes. No se trata de echar a la basura 75 años de industria energética nacional”, concluyó.

“Es un tema darwiniano, el grande se va a comer al pequeño, no hay manera de competir, Pemex está secuestrada financieramente”, concluyó Jalife.

Entrevista.

Redacción--aristeguinoticias.com