Bravo Mena no pasó "prueba de fuego UNAM"

Luis Felipe Bravo Mena, candidato a la gubernatura del Estado de México acudió a la FES Acatlán de la UNAM para dialogar con los jóvenes, pero su exposición fue interrumpida en varias ocasiones por supuestos estudiantes, quienes lo acusaban de ser militante del Yunque.

Bravo Mena buscó la forma de establecer el diálogo, aunque este se dio de manera atropellada porque no frenaban los insultos entre los simpatizantes del panista y los opositores.

En el auditorio, el ex secretario particular del presidente Felipe Calderón encaró a sus opositores y logró mantener la calma; sin embargo, a su salida se topó con una turba que lo hostigó durante más de cien metros, distancia a la que se encontraba su vehículo.

Al abordar su camioneta, los presuntos estudiantes desataron la violencia y a patadas, puñetazos y botellazos despidieron al candidato de las instalaciones de la máxima casa de estudios.

Luego de sostener un encuentro con colonos de Naucalpan, aseguró que el gobierno estatal le paga la seguridad de una empresa privada llamada Control, debido a que rechazó ser custodiado por policías de la entidad mexiquense.


El aspirante panista señaló que su vigilancia en los 45 días de contienda electoral estará a cargo de seis elementos.

“Rechacé que me cuidaran elementos policiacos, no rechacé la oferta de que pudieran hacerse cargo de nuestra seguridad”.

Precisó que él presentó la idea y fue bien recibida por la autoridad estatal; no obstante, no reveló el costo de la escolta.

Ante los líderes vecinales, Bravo Mena se comprometió a poner fin al autoritarismo en la entidad que gobierna Enrique Peña.

Reiteró que en su gobierno se atenderán los problemas de seguridad y transporte que hasta ahora han hecho parecer que no existen como si se viviera una telenovela color de rosa.

“Eso es falso, porque hay situaciones graves en la entidad que ya es justo resolver.

“Ya es justo cambiar la manera de gobernar, porque la verdadera alternancia es que exista un gobierno ciudadano que encuentre las soluciones, pero bien entendidas y establezca un plan para resolverlas”.

Para combatir la inseguridad, Bravo Mena se comprometió a mejorar las condiciones de los policías, dignificarlos y lograr que la sociedad tenga confianza en ellos.

Para ello, detalló, los elementos deberán de capacitarse y profesionalizarse “mediante acciones muy concretas, que incluirán un programa de centros de control de confianza para que estén certificados”.

Redacción--Milenio