Enfrentamiento entre Israel y Turquía, EU en problemas

WASHINGTON — El gobierno de Barack Obama estaba entre la espada y la pared tras el ataque del ejército israelí contra una flotilla que se dirigía a Gaza con ayuda humanitaria, y que enfrentó a dos de sus principales aliados en Medio Oriente, Israel y Turquía, dijeron analistas.

Los lazos entre Estados Unidos y Turquía, ya tensos debido a la diplomacia de Ankara hacia Irán, corren riesgo de nuevos daños tras el ataque israelí del lunes contra un barco de bandera turca, que integraba una flotilla que llevaba ayuda humanitaria a la Franja de Gaza, bloqueada por Israel y gobernada por el Hamas, estimaron analistas.

El ataque israelí pone sobre el tapete la intención de Ankara de fijar sus propias metas en Medio Oriente, agregaron.

Mientras el primer ministro turco Recep Tayyip Erdogan reaccionó duramente contra Israel tras el ataque, el presidente estadounidense Barack Obama declinó condenar al Estado hebreo.

No obstante, Obama se comunicó con Erdogan para expresarle sus "sentidas condolencias" por los nueve muertos que dejó el ataque, cuatro de los cuales eran turcos, e informarle que Washington trabajaba con Israel para liberar a los pasajeros y los buques confiscados.

Un alto funcionario del Departamento de Estado subrayó lo buena que había sido la reunión de dos horas el martes entre la secretaria de Estado Hillary Clinton y el ministro de Relaciones Exteriores turco, Ahmet Davutoglu.

"Para nada fue una reunión áspera", dijo el funcionario a los periodistas, a condición de no ser identificado.

Ambos "pusieron énfasis en el hecho de que claramente somos amigos de Turquía, amigos de Israel, y que abordaremos este asunto como estrechos aliados y amigos", agregó.

No obstante, el analista Steven Cook señaló que "llegado el momento, nos vamos a volcar más hacia Israel que a Turquía en una serie de asuntos".

"Y la principal diferencia ha sido sobre el Hamas", dijo a la AFP Cook, un analissta del Consejo de Relaciones Exteriores.

El presidente turco Abdullah Gul dijo este mes que Hamas no debería ser excluido del proceso de paz en Medio Oriente y puso énfasis en la necesidad de reunir a los palestinos, divididos entre Al Fatah, respaldado por Estados Unidos, que gobierna en Cisjordania, y el Hamas, que gobierna en Gaza.

Sin embargo, Estados Unidos y sus socios internacionales exigen que el Hamas reconozca primero el derecho de Israel a existir, que abandone la violencia contra ese Estado y acepte los acuerdos israelo-palestinos previos.

"Los turcos se han convertido en competidores de Estados Unidos en algunos lugares de Medio Oriente", señaló Cook.

Ankara ha mantenido una creciente confrontación con Estados Unidos por el rechazo de Washington a un acuerdo tripartito firmado a mediados de mayo entre Turquía, Brasil e Irán sobre intercambio de uranio.

Asimismo, Cook dijo que Estados Unidos y Turquía mantienen posturas divergentes sobre Siria, que también apoya al Hamas y al movimiento libanés radical Hezbolá.

"Han habido cambios en el mundo (y) los turcos sopesan sus intereses en forma diferente a nosotros", añadió.

Turquía se ve a sí misma "con un papel cada vez más influyente y no están necesariamente dispuestos a adherir a la hoja de ruta que nosotros hemos fijado", dijo Cook.

La analista Marina Ottaway estimó que "el asunto más delicado es cómo" el ataque israelí afectará las relaciones entre Turquía y Estados Unidos en momentos en que ambos países visualizan en forma diferente sus intereses en Medio Oriente.

Sus lazos "están en un momento crítico porque Turquía se sintió ofendida por el rechazo de Washington al acuerdo nuclear con Irán que firmaron con Brasil", señaló Ottaway en un análisis.

"Las relaciones solo empeorarán si la reacción de Estados Unidos al incidente (del lunes) lleva a Turquía a la conclusión de que Washington condona las acciones de Israel", indicó, y agregó que Washington "debe pensar cuidadosamente sobre las implicancias a largo plazo de su respuesta".

Redacción--AFP