Valdimir Putin en el “patrio trasero" de Estados Unidos

Hugo Chávez recibe la visita del primer ministro ruso Valdimir Putin

El 2 de abril, fecha local, el primer ministro de Rusia Putin llegó a Venezuela para realizar una visita oficial. Suscribió junto con el presidente venezolano Chávez 31 acuerdos de cooperación bilateral.

La cooperación se multiplica en todos los terrenos.

Es la primera visita de Estado que hizo a Venezuela. En las 12 horas de su estancia en Venezuela ha logrado resultados fructíferos.

En el terreno de energía, los dos países planean desarrollar en conjunto el Campo Petrolífero Junín 6 en la cuenca del río Orinoco de Venezuela. La inversión en este proyecto suma 20.000 millones de dólares USA y dura 40 años, con una capacidad prevista de producción diaria de 450.000 barriles de crudo. Según se informa la Faja Petrolífera de Orinoco tiene una reserva de unos 513..000 millones de barriles de crudo pesado, el doble de la reserva de Arabe Saudita.

La venta de armas es siempre el plato fuerte de las visitas de los dirigentes rusos al exterior. El 2 en la conferencia de prensa ofrecida en conjunto por Chávez y Putin, el presidente venezolano reveló que continuará comprando a Moscú una “determinda cantidad” de armas. Funcionarios rusos que acompañan a Putin para hacer la visita revelaron que Venezuela planea comprar 50 An-148 aviones de pasajeros y Be-200 aviones amfibios de Rusia. Los dos altos cargos empezaron el 31 de marzo a conversar sobre los asuntos de contrato. Desde 2005 Rusia y Venezuela han firmado 12 contratos de compra de armas con una suma de 4.400 millones de dólares.

Chávez pretende desplegar cooperación con Rusia en materia de la energía nuclear para superar la crisis de la escasez de electricidad. Chávez manifestó: “Estamos preparados para concluir el primer acuerdo sobre la utilización de enegía nuclear para la generación de la electricidad. Desarrollamos energía nuclear no para fabricar bombas atómicas, sino para fines pacíficos. Es necesario que nos preparemos para la época de post-petrolera.”

En el mismo día, Patin se entrevistó con el presidente boliviano Morales. Ambas partes realizaron una amplia discusión, que incluye principalmente asuntos de defensa y la energía. Además, Putin reveló la noticia de que el presidente ruso Dmitry Medvedev visitará en fechas próximas a Brasil.

Las dos partes salen ganando en la cooperación.

Para estabilizar la situación regional e interna y para superar en conjunto las dificultades económicas, Rusia y los países latinoamericanos se valen mutuamente para hacer frente a la amenaza exterior. Una en el este, otros en el sur, una en el norte, otros en el sur, están ajetreados para consolidar “lazos parentescos”.

Medvedev había señalado con anterioridad: “Tenemos amigos en América Latina, y AL es una de las zonas de ventajas para Rusia.” Según los análisis hechos por expertos, Rusia y los países latinoamericanos desarrollan aceleradamente su cooperación energética porque Rusia pretende elevar su status en la configuración internacional de energías y fortalecer su capacidad para intervenir en los precios de energéticos en la esfera internacional. Con el incremento de su poderío económico, los países de izquierda de América Latina están cada vez más anciosos de liberar las ataduras de “Estrategia Americana”. Venezuela y otros países latinoamericanos esperan llevar a cabo su estrategia pluralista de energía por medio de fortalecer su cooperación con Rusia, a fin de evitar someterse a Estados Unidos en todos los aspectos.

Además, después de la firma del nuevo tratado de desarmamento nuclear entre EEUU y Rusia el 8 de abril, la existencia del sistema de escudo antimisiles será un importante tema que afecta las relaciones entre Rusia y EEUU. La cooperación con los países latinoamericanos en materia de energía, defensa y utilización civil de energía nuclear permite a Rusia tener una nueva ficha en su competición con EEUU. Los medios rusos sostienen que la visita de Putin es una buena oportunidad para demostrar a EEUU que Rusia tiene muchos buenos amigos en todo el mundo.”

Todavía persisten los humos de las explosiones en el metro de Moscú. En este momento Putin se apresura a hacer una visita a Venezuela. Lo hace para que antes de la celebración de la Cumbre del 12 de este mes en Washington sobre la seguridad nuclear, pueda evitar hábilmente el problema sensible y no violar la cooperación de la legalidad internacional. Hay análisis que sostienen que si Rusia tiene que ceder a EEUU en el problema de Irán, la presente visita de Putin es “perder en un lado y ganar en otro”, disponiendo de un espacio de maniobra diplomática en el campo de América Latina.

Contribuye a la configuración multi- escalonada

Es natural que EEUU esté atento todo momento a lo que sucede en América Latina. Pero al parecer que la presente cooperación entre Rusia y Venezuela no ha creado demasiada tensión en EEUU. Con respecto a la demanda de Venezuela para que Rusia le ayude a desarrollar su industria cosmonaútica, Clowley, portavoz del Departamento de Estado de EEUU, manifestó el 2 con palabras no exentas de ironía: “En vista de su escasez de electricidad, ... es preferible que Venezuela emplee su recurso en el interior del país, y no en el espacio.

Ironía aparte, no se puede pasar por alto el significado de Venezuela, la cuerta exportadora de petróleo del mundo, para la seguridad de energía de EEUU. El Gobierno de Obama anunició el 31 de marzo su decisión de ampliar la explotación de petróleo y gas natural en el Atlántico, el Este del Golfo de México, y el norte de Alaska. Este programa es considerado como una de las medidas para reducir la dependencia de EEUU de la importación de crudo.

Desde luego, tanto Rusia como Venezuela han destacado que su cooperación bilateral no apunta contra EEUU. En la conferencia de prensa ofrecida el 2, Chávez señaló: “No pretendemos establecer una alianza contra EEUU. En cuanto a cómo piensa el Gobierno norteamericano, no podemos intervenir. Cuándo se le preguntó cómo enfocó el aumento drásticos de los gastos de defensa nacional de Venezuela, Chávez dijo: “Francamente no pretendemos organizar una alianza de resistencia contra Washington.”. Por su parte, Putin manifestó: “Nuestro objetivo es que el mundo se vuelva más democrático, y se desarrolle hacia el equilibrio y multi-polarización. En este sentido es particularmente más importante la cooperación entre Rusia y Venezuela.”.

Analistas sostienen que a corto plazo la cooperación entre Rusia y los países latinoamericanos en materia economica y militar despertará gran atención de EEUU, pero no supone un gran impacto en las relaciones entre Rusia de EEUU. El pulso entre estas dos potencias persiste.

Redacción--Pueblo en línea