Cerca “La Familia” al Estado de México

Tras diez días de ataques a bases de la Policía Federal, cruentos enfrentamientos y ejecuciones en poblaciones de Michoacán limítrofes con el Estado de México, el gobierno mexiquense no toma previsiones, no solicita el apoyo del Ejército ni se coordina ni define su participación en los operativos desplegados por las fuerzas federales.

Quedaron en el olvido hechos violentos, como la ejecución del director de Seguridad Pública de Maravatio, Michoacán, cuyo cuerpo fue abandonado en la carretera hacia el municipio mexiquense de San José del Rincón con un “narcomensaje”.

La incursión de encapuchados que se identificaron como zetas e hicieron disparos al aire en la ciudad de Luvianos hace quince días, en busca de integrantes de la familia y el enfrentamiento de la semana anterior de sicarios de esta organización delictiva y efectivos de la ASE, con saldo de una decena de muertos y un policía estatal levantado que, a la fecha, está desaparecido.

Los municipios surianos de Otzoloapan, colindante con Michoacán; Luvianos, Zacualpan y Tlatlaya, vecinos de Guerrero, son cotos dominados por los dos cárteles, el de La Familia en el primero de ellos y de los zetas los tres restantes.

Pese a lo anterior, no hay presencia ni estrategia de seguridad por parte de las autoridades mexiquenses en esa conflictiva región, como tampoco se ha instalado el batallón del Ejército Mexicano en Tejupilco como se anunció.

El “efecto cucaracha” es un fenómeno común en la zona, cuando la Policía Federal y el Ejército presionan a los grupos de La Familia en la región michoacana de Zitácuaro o en la guerrerense de Arcelia, Altamirano y Pilcaya y se desplazan hasta los municipios de Tonatico e Ixtapan de la Sal.

Nuevos ataques a bases de la Policía Federal en Michoacán

Cabe señalar que en Michoacán, por quinto día consecutivo, sicarios mantienen los ataques contra objetivos de la Policía Federal en Michoacán, al atacar una base policiaca y ejecutar a tres personas.

En el municipio de Maravatío, un comando disparó durante la madrugada contra las oficinas de la PF sin que hasta el momento se reporte si hubo víctimas.

En el sitio quedaron esparcidos decenas de casquillos percutidos de armas de grueso calibre, en lo que constituye el atentado número 13 en contra de las fuerza federales desde el sábado pasado.

En tanto, bases policíacas estatales reportaron que tres cadáveres fueron hallados a un costado de la Autopista Morelia-Lázaro Cárdenas, debajo de un puente vehicular, a la altura de la comunidad de El Tejabán, Municipio de Nuevo Urecho.

El hallazgo fue realizado a unos 60 kilómetros del sitio donde este lunes fueron tirados los cuerpos de 12 personas también ejecutadas y torturadas.

Se informó que una de las víctimas tiene sujetado sobre la espalda un papel, pero no se ha precisado si contiene algún mensaje.

Los tres cuerpos presentan el tiro de gracia y no han sido identificados aún por las autoridades.

Eran Policías Federales los 12 ejecutados

Monte Alejandro Rubido, secretario ejecutivo de la SSPF, confirmó que eran policías federales y no militares los ejecutados encontrados en la carretera Siglo XXI de Michoacán.

En conferencia de prensa, Rubido informó que los 12 elementos se encontraban haciendo labor de inteligencia en Michoacán y fueron atacados cuando se encontraban fuera de servicio.

Dijo que el nuevo jefe de "La Familia Michoacana", Severo Gómez, alias "La Tuta" fue el que ordenó el ataque contra la base de la Policía Federal en Maravatío y fue quien ordenó las ejecuciones de los elementos federales.

Los 12 cadáveres fueron encontrados la noche del pasado lunes en la autopista Siglo 21 y esta mañana fueron encontrados otros tres más en la misma carretera, los cuales están siendo relacionados con los policías federales ejecutados.

Las primeras líneas de investigación apuntaron a que se trataban de oficiales militares.

Redacción--Alfa diario