PGJEM implementará sistema digitalizado para evitar errores de identificación

Carlos y Bárbara pasaron meses en el SEMEFO como desconocidos

Para evitar errores en la identificación de los cadáveres que llegan a la morgue, tal y como ocurrió con el cuerpo del menor Carlos Eduardo Martínez Gutiérrez, quien permaneció 6 meses sin ser identificado, y de María Bárbara Reyes Muñíz encontrada 20 meses después de su desaparición, la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJEM), implementará un nuevo sistema digitalizado.

El procurador de la entidad, Miguel Ángel Contreras Nieto, dijo que lamentaba lo sucedido en el caso de Carlos Eduardo, pero justificó el error por la falta de tecnología para identificar los cadáveres.

EL funcionario dijo que en el caso específico del menor, ya se inició con un procedimiento administrativo y penal en contra de los cuatro agentes del Ministerio Público, encargados del caso,  al igual que contra el médico legista.

Contreras Nieto dijo aseguró que el área de responsabilidades será la Contraloría, misma que determinará el grado de responsabilidad de cada funcionario.

Dijo que no era la primera vez que un cadáver pasaba meses en la morgue sin ser identificado, por ello dijo que derivado de este y otros casos similares, se determinó implementar un nuevo mecanismo que permita la rápida ubicación e identificación plena de las personas que llegan a los centros forenses.

Carlos Eduardo Martínez González, adolescente de 14 años fue secuestrado a la salida del Colegio Montessori el 14 de febrero, y permaneció seis meses en calidad de desconocido en el Servicio Médico Forense de Tenancingo, no obstante que su cuerpo fue recuperado horas después de su homicidio; situación similar a la que sufrió María Bárbara Reyes Muñíz de 17 años secuestrada el 8 de agosto del 2011, ella fue encontrada 20 meses después en el SEMEFO de Cuautitlán Izcallli.

Redacción--alfa diario.net