Identifican a mujer calcinada en Ecatepec; era madre soltera y empleada de Aurrerá

La mujer que apareció quemada la mañana del martes en un predio en la zona conocida como “La Nopalera”, en Ciudad Cuauhtémoc, había sido secuestrada alrededor de las 07.00 horas en San Andrés de la Cañada.

Se trata de Gabriela Berenice Faustino Vicuña, de 28 años de edad, que al parecer fue subida por la fuerza a un vehículo cuando regresaba a su casa después de recoger su dotación de leche, en la lechería Liconsa, ubicada a dos cuadras de su hogar.

Beneficiarias de Liconsa, encontraron la cubeta con las bolsas de leche, una de ellas abierta así como el pan aplastado tirado en la banqueta, a unos pasos de la lechería ubicada en la calle Ramón Soberanes esquina con Avenida Rancho Viejo.

También encontraron la tarjeta de beneficiaria expedida a nombre de Gabriela Berenice Faustino Vicuña, por lo que de inmediato dieron aviso a sus familiares.

Raúl Faustino Tapia, padre de Gabriela, relató que su hija de 28 años de edad, había acudido temprano como todos los días a la lechería que se localiza a escasas dos cuadras de su hogar.

Faustino Tapia, aseguró que su hija no tenía motivos para ausentarse sin dar aviso de su casa ubicada en la calle Brisas, mencionó que incluso había puesto agua a calentar para darse un baño ya que entraría a trabajar a una tienda Aurrerá a las 08:00 horas.

“La manera en que fueron encontradas las bolsas de leche y el pan, tirados en el suelo, nos hace pensar que fue subida por la fuerza a algún vehículo, que tiro las cosas durante el jaloneo”, refirió su progenitor.

El padre de Gabriela, manifestó que su hija no tenía problemas con nadie, que se dedicaba a su trabajo donde ya tenía alrededor de 5 años en la Bodega Aurrera en San Andrés de la Cañada, dijo desconocer si su hija se encontraba en alguna relación sentimental.

Aseguró que Gabriela, jamás habría abandonado su menor hijo de 8 años de edad, de nombre Ángel Gabriel, que refirió era su adoración. De un metro con 60 centímetros de estatura, cabello negro castaño y ojos de color café, al momento de su desaparición Gabriela vestía pants de color blanco, sudadera roja y zapatos tenis de color rosa.

Misma vestimenta que traía el cuerpo sin vida y parcialmente quemado que fue encontrado alrededor de las 10:30 horas en un terreno baldío localizado en las calles Palma y Pirules.

Los familiares denunciaron la desaparición de Gabriela ante la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM), pero vía telefónica horas más tarde les avisaron de la presencia de un cuerpo en el Servicio Médico Forense (Semefo) que correspondía a las características de Gabriela Berenice.

Tras acudir a la morgue en la colonia La Mora en San Cristóbal, Raúl Faustino identificó el cuerpo de su hija, exigió a las autoridades den con el paradero de los asesinos de su hija y sean castigados con todo el peso de la ley.

Redacción--afondoedomex