Reforma hacendaria Peña Nieto, impuestos a los más ricos

La administración del presidente Enrique Peña propondrá elevar la tasa máxima actual del Impuesto Sobre la Renta (ISR) del 30 al 32 por ciento y gravar con un 10 por ciento las ganancias en bolsa y dividendos, según un borrador de la reforma fiscal que se anunciará hoy.

No obstante, el gobierno federal no propondrá gravar con el Impuesto al Valor Agregado (IVA) a los alimentos y medicinas, en momentos en que la economía mexicana se ha ralentizado.

La iniciativa gubernamental también planteará eliminar el régimen de consolidación fiscal, así como rebajar la carga fiscal de la petrolera estatal Pemex desde el 79 por ciento actual a menos del 60 por ciento.

La administración federal prevé que la reforma tenga un impacto fiscal del 2.9 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).

De acuerdo con el borrador, se mantendrán las exenciones a servicios médicos y transporte urbano y se homologará el IVA en la zona de la frontera, que goza hasta ahora de una tasa diferenciada.

Sin embargo, la reforma elimina las exenciones de IVA en servicios educativos e intereses de hipotecas.

La nueva tasa tope del ISR del 32 por ciento aplicaría para quienes devengan ingresos superiores a 500 mil pesos anuales, al tiempo que se eliminaran buena parte de los regímenes especiales.

Por otra parte, se planteara eliminar el Impuesto Empresarial a Tasa Unica (IETU) y el Impuesto a los Depósitos en Efectivo (IDE).

Además plantea aplicar el llamado Impuesto Especial sobre Producción Y Servicios (IEPS) a combustibles y plaguicidas así como a las bebidas azucaradas, con el objetivo de combatir la obesidad.

El gobierno, que presentará hoy por la tarde su propuesta de paquete presupuestario para el 2014, propondrá un déficit transitorio de 0 a 0.4 por ciento del PIB en el 2013 y del 1.5 por ciento para el 2014.

Redacción--Milenio