Nevado de Toluca en dos décadas perderá su función ambiental

Ciudad de México.- A 77 años de que se decretó como Parque Nacional, la montaña del Nevado de Toluca está al borde de su deterioro ambiental.

Un estudio de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) advierte que su vocación forestal está siendo sustituida por usos de suelo ganaderos, agrícolas, mineros y urbanos; la población silvestre de flora y fauna ha disminuido considerablemente y su capacidad de captación e infiltración de agua se agota.

Ante este panorama, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) prevé flexibilizar el esquema de protección ecológica.

En un proyecto de decreto que se encuentra bajo revisión en la Comisión Federal de Mejora Regulatoria (Cofemer), la dependencia federal plantea modificar la categoría de Parque Nacional a la de Área de Protección de Flora y Fauna, con lo que se reducen las restricciones para la realización de diversas actividades en su superficie.

De acuerdo con la Ley General del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, de cambiarse la categoría de protección, en el Nevado podrá permitirse la realización de actividades relacionadas con la preservación, repoblación, propagación e investigación de especies así como el aprovechamiento de los recursos naturales por parte de las comunidades.

"Aunque el decreto por el que se declaró como Parque Nacional a la montaña denominada Nevado de Toluca excluyó expresamente a los terrenos agrícolas en cultivo y poblados (...) ello no impidió que dichos poblados continuaran realizando actividades productivas que ejercen presión sobre los recursos naturales del área natural protegida, a pesar de encontrarse fuera de su polígono.

"Ante la existencia de asentamientos humanos, resultado de dotaciones agrarias realizadas con posterioridad al establecimiento del Parque Nacional, es necesario adoptar esquemas de conservación que armonicen las necesidades económicas y sociales dentro y fuera del área natural protegida con los objetivos de conservación de los elementos naturales que lo conforman", indica el proyecto de decreto.

A través del cambio de categoría, señala, se pretende definir un mapa de ubicación del área natural, precisar la superficie del área protegida, integrar la descripción limítrofe-topográfica y establecer la zonificación y subzonificación permitiendo mayor certeza a los colindantes y a la propia autoridad federal. 

La superficie actual del Parque se estima en 53 mil 590 punto 67 hectáreas, distribuida en 10 municipios del Estado de México.

Diagnóstico

El Estudio Previo Justificativo para la Modificación de la Declaratoria del Área Natural Protegida del Parque Nacional Nevado de Toluca, elaborado por la Conanp, señala entre los efectos del deterioro ambiental en la zona el aumento de cárcavas y erosión con la pérdida de miles de toneladas de suelo que sirven para el cultivo de papa, desarrollo de minas y extracción de tepojal, en el incremento e intensidad de inundaciones en el Valle de Toluca y en una mayor incidencia de plagas e incendios.

"La gestión y las acciones de protección han sido insuficientes para contener el deterioro, expandiéndose la frontera agrícola y pecuaria, la tala clandestina selectiva, las plagas y enfermedades, y la erosión generalizada en el Nevado. 

Adicionalmente, la declaratoria de Parque Nacional establece un régimen totalmente restrictivo en cuanto al uso, aprovechamiento y manejo del recurso forestal, lo que lejos de limitar el aprovechamiento forestal, ha incidido en la tala clandestina, sin que haya la suficiente capacidad de protección y vigilancia", indica el estudio que se anexa a la propuesta de decreto.

En condición de riesgo, agrega, se encuentran 16 especies sujetas a protección especial, 20 amenazadas y cuatro en peligro de extinción. 

"Los taladores eligen los árboles más sanos y grandes, dejando los enfermos plagados y mal formados, lo que provoca la ausencia de árboles padre en buenas condiciones que proporciones semillas e hijos fuertes y sanos", se expone.

Advierte que de continuar esta situación, se prevé que en una o dos décadas pierda completamente su función ambiental en la parte norte con graves consecuencias ambientales, sociales y económicas.

Redacción--El Comunicador/Reforma