Poder Judicial controlará órdenes de aprehensión

En la Procuraduría General de Justicia del Estado de México ya no habrá área especial de aprehensiones ni personas específicas dedicadas a cumplir mandatos judiciales, sostuvo Alberto Bazbaz Sacal, quien dijo que está en pláticas con el Tribunal Superior de Justicia para que sea quien las registre directamente en un sistema.

"Se busca que la orden de aprehensión la registre el Poder Judicial directamente en un sistema y de ese sistema la Procuraduría distribuya la forma de llevar a cabo su cumplimiento", sostuvo el procurador general de Justicia mexiquense.

De modo que no habrá un área de aprehensiones, pero sí un sistema de aprehensiones, lo que implicará que todas las policías sean capaces de cumplir los mandatos judiciales y no se los dejen únicamente a unos cuantos porque no se dan abasto.

"De modo que los -policías- de homicidios van a cumplir las de homicidios y como van a estar en un sistema, pues cualquiera las puede cumplir", explicó.

Reconoció que los sistemas de operación son todavía un poco deficientes en la institución, por lo que la mayor parte de las aprehensiones se realizan en acciones de flagrancia o por casos urgentes.

"Hay que concentrarnos; las policías municipales también nos pueden ayudar en un tipo de órdenes de aprehensión, la ASE a otras y con buenos sistemas se cumplen órdenes de aprehensión en las oficinas de Tránsito cuando alguien va por su licencia, por lo que no hay necesidad de agarrar a un policía y ponerlo a buscar por todos lados", advirtió el abogado.

Dijo que la gente cree todavía en el papelito de la orden de aprehensión, el cual tiene un valor pero en el esquema de la corrupción, pues lo guardan y lo venden; desafortunadamente se siguen dando esas prácticas añejas de "venta" y "ordeña" de mandatos judiciales, pues siguen teniendo conocimiento de hechos de esta naturaleza.

Recordó que cuando llegó a la institución hace dos años, el ciudadano ni siquiera se preocupaba porque la autoridad resolviera los crímenes, sino el mayor reclamo era que lo dejaran de distorsionar los elementos de la Policía Ministerial.

Dos años después el reclamo es que se cumplan más órdenes de aprehensión, lo que no quiere decir que no haya todavía agentes corruptos, pero se está teniendo un mayor control.

Redacción--Sol de Toluca