Revive Roberto Madrazo el caso de Montiel Rojas

El ex gobernador del Estado de México, Arturo Montiel Rojas, y la líder del SNTE, Elba Esther Gordillo, fueron los culpables directos de la debacle del PRI en el 2006; el primero por ocultar que era corrupto, y la segunda por querer acabar con Roberto Madrazo Pintado.

Lo anterior fue expuesto por el político tabascuelo, quien asegura que Montiel Rojas ocultó que podría ser blanco de ataques por presuntos actos de corrupción y, con ello, frenó la posibilidad de que el ex gobernador de Coahuila, y actual delegado del CEN del PRI en la entidad, Enrique Martínez y Martínez, se convirtiera en el abanderado presidencial del PRI en las elecciones del 2006.

El señalamiento de Roberto Madrazo Pintado, que reaparece en escena sin bigote y con el cabello canoso, fue realizado a Reporte Índigo, en una entrevista donde asegura que la debacle de su partido se gestó precisamente en la tierra de Martínez y Martínez, y en la cual estuvo presente Elba Esther Godillo Morales, líder del SNTE.

Madrazo realiza dichas revelaciones tomando de base su libro “El Despojo”, y en la entrevista señala la participación que Coahuila tuvo en lo que llama “historia de desencuentros entre los priístas”.

Destaca que aunque creía que Enrique Jackson era el más probable abanderado entre los aspirantes a la candidatura, Martínez y Martínez también podía obtenerla, y recuerda que los miembros del llamado TUCOM (Todos Unidos Contra Madrazo) tuvieron una reunión en la casa de Natividad González Parás en la Ciudad de México, en la cual Rafael Rodríguez Barrera, árbitro del proceso interno del PRI, preguntó a Arturo Montiel si no había posibilidad de que pudieran acusarlo de corrupción y con ello dañar a su partido.

A ese cuestionamiento, el entonces gobernador del Estado de México respondió que no tenía problema alguno, incluso cuando Genaro Borrego Estrada le pidió definirse bien para no perjudicar al partido.

Madrazo considera que de haber reconocido que podría ser implicado en acciones irregulares, los abanderados priístas pudieron haber sido Enrique Martínez o Enrique Jackson.

El tabasqueño también expone que la elección del candidato del TUCOM se hizo en una mala fecha para Martínez, pues fue poco antes de Semana Santa y varios de sus seguidores de la sociedad civil estaban fuera del país.

En la entrevista en Internet, el ex líder nacional tricolor revela otra participación importante de Coahuila en la debacle electoral que el PRI sufrió en julio del 2006: la entrada de Elba Esther Gordillo al proceso.

Con su acostumbrado estilo, Madrazo Pintado narra que durante una reunión en Saltillo, en la casa de Enrique Martínez, la dirigente nacional del SNTE, convenció a Arturo Montiel contender por la candidatura del PRI y que lo atacara, porque, le dijo, “Madrazo está orquestando las acusaciones de enriquecimiento en tu contra”.

“Que se lance (en contra mía, le decía Gordillo), porque yo era el que corría la filtración de la información sobre la fortuna que tenía Montiel”, dijo el tabasqueño.

El autor de “El Despojo” afirma que trató de evitar ataques con el mexiquense, pero éste nuevamente, desde Coahuila lo atacó públicamente.

“Desde Saltillo lo quiere entrevistar López Dóriga”, recuerda Madrazo, “no sale…, sale tarde, y ya casi terminaba el programa y se lanza en contra mía”.

Ante ello, justifica el ex candidato presidencial priísta, “yo tuve que aclarar que el peor enemigo de Montiel era Montiel”.

La ruptura derivada de aquel encuentro en Saltillo fue clave, entre otros aspectos, como sus propios errores, para entender la derrota del PRI en las urnas.

“La ruptura interna del partido, que finalmente lo llevó a la debacle electoral, se gestó en una velada en Saltillo”.

Redacción--Alfa Diario