Cambian a bebés en clínica ISSEMyM; autoridades no intervienen en el asunto

Al llegar al mundo, dos bebés coincidieron en una sala de partos, donde por una negligencia médica fueron intercambiados de identidad, y durante más de año y medio crecieron con una familia equivocada con quien compartieron los mejores, pero también más dolorosos momentos de sus vidas.

Matías e Ian nacieron el 26 de enero de 2012 en la clínica Materno Infantil del Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios (ISSEMyM). Matías, quien pesó tres kilos 500 gramos, fue entregado a la señora Anaya.

Destrozados, Jesús Anaya Alpizar y su esposa compartieron la historia de amor que tuvieron con Matías, quien desde que nació se convirtió en todo para ellos, para sus hermanos, tíos y abuelos.

La noche del 17 de mayo de 2013, con uso excesivo de la fuerza, judiciales de la Procuraduría estatal arribaron a uno de los domicilios de la familia, quien se enteró hasta el otro día que los agentes buscaban a la señora Anaya.

La pareja recuerda que al presentarse en la Procuraduría se enteraron que una mujer aseguraba que le habían cambiado a su hijo al nacer en la Clínica Materno Infantil del ISSEMyM, el mismo día y lugar donde nació Matías.

El matrimonio Anaya se reunió con la mujer, así como con los padres de otro niño que había nacido ese mismo día y lugar. Días después se sometieron a unas pruebas de ADN y, al tener los resultados, recibieron la noticia: Matías no era su hijo.

El matrimonio Anaya peleó legalmente por la patria potestad de ambos niños, pero decidieron hacer lo que ellos creían como correcto y entregaron a Matías a su madre biológica el 5 de noviembre de 2013.

“Todos los días nos esforzamos por dar todo nuestro amor a Ian, deseando que el tiempo ayude a sanar las heridas”, comenta la madre.

“Todo esto afectó nuestra salud psicológica y emocional, padecemos intranquilidad y depresión”, agrega el padre.

Aunque los daños emocionales ocasionados no se pueden reparar, los padres afectados exigen castigo para los responsables, así como un cambio urgente en los protocolos de nacimientos, a fin de evitar que este tipo de casos se repitan.

Hasta el momento, ni la Comisión de Conciliación y Arbitraje Médico del Estado de México ni el gobierno estatal han intervenido en este asunto.

El caso actualmente está en la Procuraduría estatal bajo la carpeta de investigación 192820360006713; al comprobarse la violación a los derechos humanos de los entonces recién nacidos y sus familiares, la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de México emitió la recomendación CODHEM/TOL/342/2013 para el ISSEMYM, con fecha del 5 de septiembre de 2014.

Entre las personas que señalan como presuntos responsables se encuentran el director del ISSEMyM, Delfino Reyes Paredes; la entonces directora del hospital, Mónica Pérez Santín, y el ginecólogo Everardo Ibarra, entre otros médicos y enfermeras.

Redacción--eluniversal.com.mx