Gobiernos estatales usan dinero de educación para "placeres"

Aprovechando que nadie las sanciona, las administraciones estatales utilizan los recursos del FAEB de "caja chica".

De acuerdo con la Cuenta Pública 2009, en 20 entidades, los recursos del FAEB se destinan para financiar personal estatal

Ciudad de México.- Los gobiernos de los estados utilizan el Fondo de Aportaciones para la Educación Básica (FAEB) para pagar de todo... aunque no esté permitido.

Lo mismo compran muebles o medallas, que rentan aerotaxis o camiones, pagan fiestas o boletos de avión y hacen donativos.

Cerca del 95 por ciento de los 220 mil millones de pesos del FAEB se usa para pagar la nómina de los maestros federalizados, pero el resto funciona como una caja chica de los gobiernos estatales para gastos no autorizados.

En 2009 comenzó a operar el Acuerdo Secretarial 482, que regula el uso del FAEB, el fondo más grande que se transfiere a los estados, el cual prohíbe dar apoyos al sindicato, pagar renta de autos, eventos y gastos de comunicación social y cubrir plazas con funciones distintas a la educación.


El acuerdo señala que el dinero se debe usar exclusivamente para pagar la nómina de educación inicial, indígena, básica y normal, para prestar el servicio educativo, así como para operar el padrón de maestros y los concursos de oposición para el ingreso al servicio docente.

El informe de la Cuenta Pública 2009 de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) revela que, en Aguascalientes, se utilizaron 2 millones 466 mil pesos para la compra de muebles de la Secretaría de Gestión e Innovación, además de terrenos y vehículos para rifas del Día del Maestro.

En Baja California, se usaron 23 millones 238 mil pesos para el aguinaldo del personal jubilado.

En Campeche, del fondo se pagaron 2 millones 323 mil pesos por concepto de rentas de un edificio y locales, asesorías de impuestos, compra de boletos de avión, regalos, bebidas y alimentos para festejos de Navidad y de fin de año.

El Gobierno de Chiapas transfirió 100 millones 465 mil 700 pesos para el DIF estatal; Coahuila compró paquetes escolares para educación media superior por 15 millones 282 mil pesos, y Colima destinó un millón 206 mil pesos a uniformes, gastos de traslado y donativos.

En Hidalgo, pagaron 37 millones para festejos de los días de la Educadora, de las Madres, del Padre, del Maestro, del Niño y del Personal Docente, una peregrinación a la Basílica de Guadalupe y eventos de fin de año.

Michoacán gastó 500 mil 900 pesos para la renta de un taxi aéreo y alimentos de una reunión de la Sección 18 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).

Mientras que Puebla pagó viáticos y pasajes internacionales por 2 millones de pesos al Coro Normalista y Orquesta Sinfónica, y Tlaxcala, 2 millones 407 mil pesos para gastos funerarios.

Reponen estados sólo 12% de FAEB

Los gobiernos de los estados sólo reponen el 12 por ciento de los recursos del FAEB que usan en fines distintos a la educación, según el Informe de la Cuenta Pública del 2009 de la Auditoría Superior de la Federación.

La auditoría a los recursos que la Federación transfiere a los estados para pagar los salarios de los maestros federalizados revela que en total las entidades usaron 18 mil 870 millones de pesos en fines no educativos.

De esos recursos, sólo 12 por ciento fue repuesto por los estados y, por el resto, la ASF emitió un Pliego de Observaciones para que sea devuelto al FAEB.

El monto de recursos observados por la auditoría representan casi la totalidad de los fondos de que disponen los estados después de pagar la nómina de los maestros, que es de alrededor del 8 por ciento.

Julio Castellanos, ex oficial mayor de la Secretaría de Educación Pública (SEP), reconoció que los estados utilizan los recursos a su antojo porque no hay ninguna medida de carácter punitivo que los obligue a cumplir con el Acuerdo 482.

"Faltan las sanciones (en la legislación), pues a los Gobernadores nadie los vigila, son una especie de señores feudales, hacen lo que quieren con los recursos públicos y una prueba es el uso que le dan al FAEB", expresó.

"Ahí están las observaciones de la Auditoría y la mayor parte de las cuentas públicas en los estados son aprobadas por los Congresos locales por unanimidad".

Castellanos, actual diputado federal por el PAN, fue el responsable de elaborar y consensuar el Acuerdo Secretarial 482 que regula el uso de los recursos del FAEB, publicado en el 2009 y que comenzó a operar para ese mismo ejercicio fiscal.

"El acuerdo ha permitido saber en qué se gastan los recursos, pero no es suficiente, pues se requiere una medida de carácter punitiva que obligue a los estados a cumplir y rendir cuentas".

Juan Pardinas, director del Instituto Mexicano de la Competitividad, aseguró que el mal manejo del FAEB hace urgente revisar el marco legal que rige las labores de la ASF para fortalecer su capacidad de sancionar.

"Los estados no están cumpliendo con las reglas de operación del FAEB y este caso hace evidente la necesidad de fortalecer a la Auditoría Superior de la Federación", expresó Pardinas.

"Ello requiere modificar la ley y probablemente, si son sanciones a otros niveles de Gobierno, habrá que estudiar todo el marco constitucional que rige las labores de la auditoría".

Calificó como grave que los recursos del FAEB sirvan para fines que no están autorizados en las reglas del fondo.

"Lo del SNTE, las corruptelas, comprar equipamiento eso es muy grave, porque además deben ser acuerdos no establecidos en el contrato (de trabajo), lo que me parece corrupción descarnada".

David Calderón, director de Mexicanos Primero, aseguró que se ha vuelto una práctica común para los estados utilizar los recursos del FAEB para fines no educativos, porque saben que pueden pagar dichos recursos uno o dos años después.

"El FAEB se puede usar como caja chica como fondo revolvente", expresó.

Mientras, dijo, cualquier programa de innovación educativa que busque beneficiar directamente a las escuelas tiene a veces retrasos de hasta seis meses o más.

"La posibilidad de tener buenos resultados educativos con respecto a los programas de innovación educativa que están financiados, una parte por la Federación y otra por el estado, tiene resultados mediocres o malos porque el recurso se pagó inoportunamente".

Cubren nómina estatal

La Auditoría Superior de la Federación reveló que la mayoría de los estados cuentan con recursos federales suficientes para pagar los servicios de educación básica, tanto que les alcanzan hasta para pagar a los maestros y programas estatales.

De acuerdo con la Cuenta Pública 2009, en 20 entidades, los recursos del FAEB se destinan para financiar personal estatal.

El FAEB es un fondo de recursos que se transfiere a los estados desde 1997 a través del Ramo 33, para pagar los salarios de los maestros que fueron transferidos con la descentralización educativa de 1992.

El informe de la Cuenta Pública, revela, por ejemplo, que en Baja California, se destinaron 72 millones 98 mil pesos, para el pago a personal estatal y de programas estatales referentes a telesecundarias.

Tamaulipas fue de los que menos recursos federales utilizó, el 0.2 por ciento para el pago de programas y maestros estatales, mientras que Zacatecas fue el que más recursos destinó, el 24.4 por ciento.

Baja California Sur destinó 304 millones, el 13.8 por ciento; Campeche, 17 millones, el 6 por ciento.

Colima utilizó el 12.8 por ciento; Durango, el 15 por ciento .

Guanajuato destinó el 11.7 por ciento; Hidalgo, el 5.1 por ciento; Jalisco el 5.7 por ciento; Tlaxcala el 3.52 por ciento, Chihuahua, el 2 por ciento y Yucatán el 10.9 por ciento.

Gastan en Tlaxcala dinero en 'regalitos'

La Unidad de Servicios Educativos del Estado (USET) gastó por lo menos 10 millones de pesos del FAEB en el pago de regalitos, alimentos y fiestas para maestros y trabajadores del sector.

Así lo revela el informe de la ASF sobre la Cuenta Pública de 2009.

De acuerdo con la auditoría 09-A-29000-02-0589, la USET destinó 6 millones 151 mil 320.90 pesos del FAEB al fondo para apoyos sindicales y obsequios.

Y con ello, se presume daño a la Hacienda Pública Federal, en virtud de utilizar recursos del FAEB para objetivos no autorizados de ese fondo.

Asimismo, la dependencia local, en ese entonces encabezada por Miguel Ángel Islas Chío, realizó pagos en la partida "Alimentación para Servicios Públicos Estatales" de un millón 181 mil pesos, recursos que gastó en la compra de alimentos para el festejo del Día de la Educadora y gastos comprobables que son financiables con el fondo.

También erogó pagos y compras por 4 millones 193 mil pesos para desfiles, Día de Reyes, obsequios de talavera y otros regalos para el Día del Promotor, gastos que tampoco son financiables con el FAEB.

Tras realizar el pago de obsequios, alimentos y festejos, la ASF determinó daño y perjuicio a la Federación, por destinar dinero del FAEB a actividades y fines no compatibles.

La inspección a este fondo federal arrojó 26 observaciones, de las cuales sólo cuatro fueron solventadas por la USET, antes de que la ASF integrara el informe.

El resto, generaron tres recomendaciones, nueve pliegos de observaciones y una promoción de responsabilidad administrativa sancionatoria.

Redacción--Reforma